Nuevos desafíos como diputada provincial

Nuevos desafíos como diputada provincial

El crecimiento político lleva a nuevas responsabilidades y creo que es clave adaptarse a circunstancias nuevas, sin descartar lo aprendido, pero sin aferrarse a lo ya conocido.

El crecimiento político lleva a nuevas responsabilidades y creo que es clave adaptarse a circunstancias nuevas, sin descartar lo aprendido, pero sin aferrarse a lo ya conocido. Si bien mi primera experiencia en un cuerpo legislativo fue como concejal en la ciudad de Rosario, tengo que decir que ser diputada provincial me resulta apasionante. Implica trabajar y proyectar a otra escala, el campo de acción se amplía enormemente y se abre a tantas otras competencias. Asumí muy entusiasmada para ser parte ya no de la gestión pura y dura, sino del debate democrático, de la arena política santafesina. Y sin dudas, de todos estos años, recojo la gran experiencia parlamentaria de búsqueda de acuerdos y consensos, casi como un reflejo de la vida misma.


Tras su gestión como gobernador, Antonio Bonfatti ganó las elecciones en 2015 y se convirtió en presidente de la Cámara de Diputados. Fueron cuatro años de un trabajo legislativo muy intenso, acompañando en el debate parlamentario a un gobierno activo, presente, innovador, con estrategias a futuro, con proyectos, con gestión.


En 2019, de cara a una nueva elección, tuve el honor de compartir una lista de paridad aún antes de que lográramos sancionar la ley que desde este año establece que los partidos políticos y frentes electorales deben presentar listas compuestas con 50% de mujeres y 50% de varones. Desde el año pasado, además, nuestra Cámara pasó a ser de “Diputadas y Diputados”.


Aquella lista estuvo integrada por mujeres con trayectoria, formación y militancia, y que junto con los varones, representaba a la provincia en toda su extensión y diversidad, con sus realidades, sus costumbres, dificultades, recursos y potencialidades.


A diferencia del primer período, en este que estamos transitando ha sido la Cámara baja la que concentra la iniciativa legislativa porque desde el Ejecutivo hay una presencia de poca escala, de escasa vocación de construcción participativa.


En mi caso, el trabajo legislativo me ha permitido profundizar los temas que son de mi trayectoria, como todo lo referido a las cuestiones presupuestarias, las obras públicas y los servicios urbanos. Pero también trabajé otras temáticas de mi interés me he sumado a iniciativas de otras compañeras y compañeros del Partido Socialista y de otras fuerzas.

Clara García
Nuevos desafíos como diputada provincial

El crecimiento político lleva a nuevas responsabilidades y creo que es clave adaptarse a circunstancias nuevas, sin descartar lo aprendido, pero sin aferrarse a lo ya conocido.

El crecimiento político lleva a nuevas responsabilidades y creo que es clave adaptarse a circunstancias nuevas, sin descartar lo aprendido, pero sin aferrarse a lo ya conocido. Si bien mi primera experiencia en un cuerpo legislativo fue como concejal en la ciudad de Rosario, tengo que decir que ser diputada provincial me resulta apasionante. Implica trabajar y proyectar a otra escala, el campo de acción se amplía enormemente y se abre a tantas otras competencias. Asumí muy entusiasmada para ser parte ya no de la gestión pura y dura, sino del debate democrático, de la arena política santafesina. Y sin dudas, de todos estos años, recojo la gran experiencia parlamentaria de búsqueda de acuerdos y consensos, casi como un reflejo de la vida misma.


Tras su gestión como gobernador, Antonio Bonfatti ganó las elecciones en 2015 y se convirtió en presidente de la Cámara de Diputados. Fueron cuatro años de un trabajo legislativo muy intenso, acompañando en el debate parlamentario a un gobierno activo, presente, innovador, con estrategias a futuro, con proyectos, con gestión.


En 2019, de cara a una nueva elección, tuve el honor de compartir una lista de paridad aún antes de que lográramos sancionar la ley que desde este año establece que los partidos políticos y frentes electorales deben presentar listas compuestas con 50% de mujeres y 50% de varones. Desde el año pasado, además, nuestra Cámara pasó a ser de “Diputadas y Diputados”.


Aquella lista estuvo integrada por mujeres con trayectoria, formación y militancia, y que junto con los varones, representaba a la provincia en toda su extensión y diversidad, con sus realidades, sus costumbres, dificultades, recursos y potencialidades.


A diferencia del primer período, en este que estamos transitando ha sido la Cámara baja la que concentra la iniciativa legislativa porque desde el Ejecutivo hay una presencia de poca escala, de escasa vocación de construcción participativa.


En mi caso, el trabajo legislativo me ha permitido profundizar los temas que son de mi trayectoria, como todo lo referido a las cuestiones presupuestarias, las obras públicas y los servicios urbanos. Pero también trabajé otras temáticas de mi interés me he sumado a iniciativas de otras compañeras y compañeros del Partido Socialista y de otras fuerzas.

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